Hoy te digo gracias, gracias a
que me rompiste el corazón en mil pedazos, gracias a tus humillaciones,
engaños, maltratos, hoy soy capaz de valorar mi vida, de quererme más de lo que
antes lo hacía, o quizá ni siquiera lo entendía, porque pasé una etapa muy
importante de mi vida con una persona que nunca me valoró, con alguien egoísta y a veces cruel.
Reconoces cada parte de mis pensamientos, sabes que palabras usar exactamente
para sacarme de mis casillas, pero a pesar de todo eso, en realidad te
agradezco mucho.
Tantas noches de insomnio durante
nuestra relación, siempre pensando si tú en realidad me valorabas, muchas lágrimas
derramadas por algo que quizá nunca empezó, ojalá que en algún momento de tu
vida te des cuenta que también es necesario ser aprensivo, expresar nuestros
sentimientos, decirle todos los días a alguien que lo quieres, no me importa
que no sea a mí, porque como te repito lo nuestro nunca empezó, solo existía un
lado, el mío.
Los últimos días de lo nuestro el
sabor de tus besos era amargo, tus miradas indiferentes, yo sabía que algo
estaba pasando, pero por mi maldita insistencia nunca quise aceptarlo, nunca
acepté que dejaste de amarme, quizá si cambiaste tu forma de ser, eliminaste
esas malas costumbres de macho, ya no me insultabas, ni me hablaste mal, quizá
es una estupidez lo que diré , pero, me dolía más el no sentir tu amor, me
pegaba más el reconocer que tus pensamientos ya no eran míos, aun así te digo
gracias.
Hoy derramo mis últimas lagrimas
por ti, lo hago al momento de escribirte esta carta que sé tirarás al terminar
de leerla, te conozco tanto que al acabar o quizá ya lo haces, encenderás un
cigarro, ese vicio que nunca pudiste eliminar, siempre insistí en que lo
dejaras pero por tu pensamiento siempre tuviste presente que era una forma de
mantenerte controlado, en lo que estás equivocado, lo hacía porque me importas
(aun me sigues importando), hoy te digo gracias, siempre pensé que perdí una
etapa muy linda de mi vida estando a tu lado, muchas oportunidades dejé pasar
por darte a ti la razón en todo, pero la verdad, es que no perdí tiempo, lo veo
más como una inversión , porque todo lo que viví contigo me ayudó a recapacitar
y darme cuenta que con quien debo estar bien es conmigo misma, te doy las
gracias porque me hiciste ver la forma en la que NO quiero vivir, te perdono
todo, y te agradezco porque si todo eso no hubiera pasado, no sería la mujer
que hoy soy, siempre piensa que ocupas
un lugar muy importante en mi corazón, un recuerdo de lo feliz que fuimos
aunque fuera por poco tiempo, gracias por todo, pero sobre todo gracias porque
me enseñaste a valorarme, ojalá que un día encuentres alguien que te haga ser
diferente, ya lo eres porque sé que has cambiado para bien, dios te bendiga y
te cuide siempre.
Con amor, Dulce.