miércoles, 20 de enero de 2016

Friendzone





Soy una idiota, tu amistad es el tesoro más preciado que tengo, pero quizá mis acciones hacía ti, hicieron que te ilusionaras en algo que yo no estoy preparada o bueno creo que nuestra amistad es mucho más fuerte que cualquier cosa.

No niego que tú eres una parte importante de mi vida, me apoyaste cuando más lo necesitaba, ahí estuviste para decirme que todo iba a estar mejor, pero nunca fue un indicador de que tu podías ser algo más que un amigo, no negaré que tus abrazos fueron importantes, que cada que escuchaste quejarme de la vida siempre me sonreíste, dándome aliento de que todo pasaría a un mejor momento, no voy a negar que el hecho de verme llorar me ayudó mucho, pero también me lamento porque me viste vulnerable, lo que no me perdono porque no dejo que nadie lo haga.

Juntos hemos pasado muchas cosas, hemos vivido demasiado, hemos compartido nuestros cumpleaños, fechas importantes, siempre hemos estado el uno para el otro, siempre nos hemos dado la mano cuando menos lo esperamos pero más lo necesitamos, pero, hoy, debo decirte que lo nuestro ya no puede seguir así.

Aquella noche al salir de la universidad, recuerdo muy bien que tenías una mirada algo perdida, que estabas muy callado, recuerdo las veces que te pregunte si estabas bien a lo que siempre me respondías afirmando con  tu cabeza, nunca me imaginé lo que te pasaba por la mente, nunca pensé que esta amistad se saldría de control, no se me olvida que cuando nos dirigíamos a tu coche te detuviste repentinamente  y volteaste a verme, estuviste 2 minutos callado observándome, no sabía qué hacer, estaba asustada, pensé que estabas pasando por un momento de shock o que se yo, hasta que de tu boca lentamente salió un : ya no podemos ser amigos, porque te amo desde el primer momento que te conocí.

Realmente no supe que decir, solo reía de manera nerviosa, tú, ahí de pie frente a mí, la verdad tus palabras para mi fueron muy sinceras, tus palabras me llegaron al corazón, pero, no las aceptaba, nunca imaginé que tu mente y corazón fueran míos, me sentí aterrorizada.

Hoy te escribo después de estos 6 meses en los que no he tenido el valor de contestar tus llamadas, porque tengo miedo, hoy te escribo porque ya no puedo seguir así, nunca esperé escuchar aquellas palabras salir de tu boca, simplemente no quería que eso pasara, porque tu amistad para mi es algo invaluable, eres el mejor amigo que he tenido, contigo compartí todo, conoces mis peores secretos, conoces mis defectos mis fortalezas, simplemente me conoces, así como yo te conozco a ti, sabes y sé de tus desamores así como tú de los míos, pero, Gil, nunca pensé que yo fuera parte de tu vida, y te lo repito, nunca quise escuchar esas palabras porque hoy te digo que lamento mucho el no contestarte en ese instante, porque mi mayor miedo, siempre fue que te enamoraras de mí, pero lo peor es aceptar que yo también lo estoy de ti…

¿Volvemos a empezar?


Rebeca

No hay comentarios.:

Publicar un comentario